Un punto más a favor de la bicicleta: no sólo ahorra gastos e inversiones públicas y privadas, sino que mueve a golpe de pedal toda una economía relacionada, y me atrevería a decir que es una economía muchísimo más granular, distribuida y accesible que la de, digamos, el automóvil.
Y otro punto a favor, de regalo: en la propia infografía citan varios, pero como casi siempre, se olvidan de uno que tiene valor por sí mismo y para mí es el fundamental: porque sí.
Porque ir en bicicleta mola, es agradable, es refrescante, es liberador, es fácil, es elegante, te hace sonreír, te libera de cualquier tensión, te hace consciente de tus propias capacidades, te permite ver el mundo de otra manera y… no creo que haga falta que siga. Coge una bicicleta y disfrútala.
Visto en Planted City gracias a Carabiru.
3 comentarios
Guay y cierto, la bici mola!!!
Tanto que hablo de la economía del hidrógeno, y nunca había pensado en la Economía de la Bicicleta. Excelente post!!!
Gracias, SilvestreVivo ;)